Tras un tiempo en el dique seco, las palabras vuelven a mis manos. Este "mundo" virtual en el que quedan reflejados mis pensamientos se postula finalmente como una autopista por la que vomito ideas y sentimientos cuando mi voz no encuentran ecos de entendimiento. Sólo te tengo a tí, sólo existes tú... si mis pensamientos nublan tu juicio mi cerebro me protege cerrando las vías de comunicación y no puedo permitirme eso y lo sabes. De las diez cosas alegres diarias tu imagen suele estar presente en más de la mitad, eso no puede decirlo nadie más, ni siquiera yo.
Estoy convencido de que es así, no soy mejor, soy diferente y me expongo, mientras que no estés dispuesta a lo mismo no puedes comparar, no te pido escarnio público ni quiero ruido de monedas fariseas. Soy complicado, diferente, soy un coche de carreras, difícil de manejar y sin libro de instrucciones. Pero una máquina así sin piloto no sirve de nada, este vehículo no se puede mover si no le pisan el acelerador, si no le cambian de marcha o si no lo echan gasolina. No quiero paradas de 3,6 segundos, no somos PRO's, quiero un repostaje contínuo, como el de los aviones en vuelo. Quiero un empezar y no parar. ¿Qué quieres tú?
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